El regionalismo estará presente en la Cumbre del Futuro de Naciones Unidas

El Buró de ORU Fogar, reunido en Abidjan, acordó participar activamente en la Cumbre del Futuro convocada para los próximos 20-23 de septiembre por el secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres.  La voluntad es incidir en la necesidad de contar con una nueva gobernanza, que supere los gobiernos centralizados, acercando el poder político a los ciudadanos y reforzando los gobiernos regionales.

La Cumbre del Futuro es un evento de alto rango para crear un ‘momentum’ y acelerar el paso hacia la realización de los compromisos internacionales de desarrollo, peculiarmente la Agenda 2030, que actualmente se encuentran lejos de ser completados. Una oportunidad única para reconstruir la confianza en el multilateralismo y, así, abordar los inmensos desafíos globales. 

Antonio Guterres ha señalado que los desafíos que ‘amenazan el futuro de la humanidad’ son tres: la desigualdad y la pobreza, el problema medioambiental y la seguridad. Afirma que el debate de septiembre no debe ser sobre “Què”. Esto está ya fijado en documentos acordados globalmente como la Agenda 2030, el Acuerdo de París o la Nueva Agenda Urbana. De lo que se debe discutir, según el secretario general, es sobre el “Cómo”, vistas las dificultades de avanzar en la lucha contra la pobreza o contra el Cabio Climático.

El posicionamiento regionalista

El regionalismo va a estar en el debate de Naciones Unidas para defender un sistema multilateral descentralizado más efectivo, basado en el principio de subsidiaridad. Por el momento, ORU Fogar ya presentó enmiendas al Borrador Cero redactado por los cofacilitadores Alemania y Namibia y presentado el pasado 26 de enero. Estas enmiendas incluyen cuestiones esenciales para el nivel regional, tanto en la entradilla del texto, como en cada uno de los cinco capítulos del Borrador. En ellas, ORU Fogar reclama un Plan que sea inclusivo, descentralizado, y atento a las necesidades de la población. Es por ello que se defiende la necesidad de gobiernos regionales fuertes y bien financiados, quienes en repetidas ocasiones pasadas han demostrado su gran potencial para acciones que impactan profundamente en las comunidades de alrededor del mundo. 

Entre las enmiendas regionales se encuentra también las que hacen referencia al desarrollo rural, que es esencial, tanto como lo es la planificación de proximidad. Se defiende, por lo tanto, el principio de subsidiaridad, que debería ser promovido como medio para conseguir autonomía regional, y la necesidad de conseguir equilibrio territorial. 

ORU Fogar ha defendido también que, en tanto que actores políticos de pleno derecho y comprometidos, los gobiernos regionales sean incluidos en los procesos multilaterales. En consecuencia, se apoya la creación de un organismo permanente de Gobiernos Locales y Regionales (LRGS por sus siglas en inglés).

Se hace, así, un llamado a un sistema multilateral verdaderamente inclusivo, interconectado, descentralizado y democrático que será más complejo, pero sin duda alguna más eficiente, donde un sistema regional fuerte y atento tome la iniciativa en favor del desarrollo.

Durante los días 20 y 21 de setiembre de 2024, y en el marco de la cumbre, se celebrarán reuniones de trabajo en las que los gobiernos regionales pueden participar en las diversas actividades que se llevarán a cabo. El camino hacia la Cumbre culminará tras ello, con la creación de un Pacto de Futuro accionable que será negociado los días 22 y 23 de setiembre de 2024, y que busca abordar el ‘cómo’ debemos cooperar y coordinarnos para responder a desafíos para la comunidad global. 

 

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