La provincia de Misiones en Argentina como referente latinoamericano de alto rango ministerial en temática de cambio climático

Patricio Lombardi

Director Ejecutivo de Carbon Markets Fairness Foundation

Dos años atrás tuve el honor de ser nombrado ministro de cambio climático de Misiones, hoy ya fuera del gobierno puedo decir con confianza que, desde la política es posible cambiar las cosas en favor del clima y del planeta.

Pudimos gestionar desde el gobierno acciones claras en favor de los bosques biodiversos. Concretamente en la COP 26 de Glasgow, firmamos un acuerdo histórico, en donde la provincia como estado subnacional y bajo el programa redd+ ingresa al mercado voluntario de carbono, por lo cual recibirá fondos internacionales no reembolsables, para evitar la deforestación trabajando codo a codo junto a las comunidades que lo conservan. 

En la misma cumbre de cambio climático en Glasgow firmamos además el inicio de una alianza sur sur, creando una coalición de países y regiones de América Latina y África que compartimos esta visión conceptual de respeto a nuestros biomas. Que entendemos claramente que somos acreedores ambientales. 

Ahora es nuestra responsabilidad decirle al mundo que la conservación sin dinero, es pura conversación. 

El enfoque en este asunto debe ser holístico. Estamos ante una enorme crisis, creada por nosotros mismos. Las herramientas que necesitamos para solucionarla están basadas en la misma naturaleza. Nosotros somos parte de esa solución. Debemos conectarnos más con la naturaleza, vincularnos con la salud del planeta. 

Un bosque biodiverso nos provee agua dulce, alimentos sanos, suelos y tierra fértil, humedad que luego serán lluvias, diversidad genética, una flora variada, fauna con sus polinizadores y la vida microbiana que garantiza un ciclo de vida saludable. 

Un verdadero bosque biodiverso, alberga pueblos originarios con sus saberes ancestrales. Y de estos bosques se obtienen medicamentos que van desde la aspirina hasta la morfina, y son varias las drogas oncológicas que provienen de estos biomas. 

Pero nosotros, los humanos consumimos 1.6 planetas al año, lo que nos coloca en un claro default ambiental. Cada año que pasa, consumimos los recursos del planeta a un ritmo más rápido del que se pueden recuperar.

Para decirlo en términos financieros, vivimos sobregirados.

En los últimos 30 años el planeta tierra perdió el 40% de su capital natural. Ese es el decadente modelo económico extractivista y patriarcal que ha medido el precio de todo, pero el valor de nada. Que le ha metido la mano al planeta como si sus recursos fueran infinitos…. 

Tenemos que empezar a medir el valor de la naturaleza. 

Y no confundir valor con precio. La naturaleza debe ser valorada, cuidada y respetada. 

Nosotros no existimos independientemente de la naturaleza, por que nosotros somos naturaleza. 

Arrasar y destruir nuestros bosques se relaciona directamente con nuestra salud. En esto se basa el nuevo paradigma de una sola salud donde salud humana y planetaria son indisociables. 

Aún el cambio climático no es visto con la misma gravedad y urgencia de la pandemia, no hemos actuado con la celeridad que respondimos ante el coronavirus. 

El planeta tierra está en un proceso claro de deforestación. A lo que le sigue luego la desertificación. Con sus consecuencias irreparables y, cada vez, más devastadoras, nuestra tierra, nuestra pacha mama se está quedando sin vida, sin nutrientes.

Los bosques biodiversos, son fuente de vida y fuente de salud. De un suelo sano, salen alimentos saludables, de un suelo tóxico, salen las enfermedades que estamos viendo asociadas a los alimentos que consumimos. 

Estamos a tiempo para sanar el planeta. En esto no hay grietas. La solución es con todos. 

Necesitamos tener un enfoque holístico sobre estos temas. 

La tierra con sus bosques biodiversos son un sistema inteligente compuesto por innumerables organismos. Con millones de años de existencia. Los humanos sólo somos un aspecto de esa vida.

Debemos vincularnos más y mejor con esa inteligencia planetaria. 

Es necesario establecer un vínculo más amoroso, de mayor conexión.

Para eso les pido que hablemos de estos temas con los nuestros.

Que multipliquemos nuestra voz.

Todos juntos y cada uno desde su individualidad, podemos mejorar el presente y tratar al planeta, que es nuestra casa común, con más respeto y con más amor.